De diarreas y deposiciones varias
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Bienaventurados los limpios de culo que de ellos será la Cataluña del día nueve más uno. Noticias nos llegan del olor que traspasa las piedras renacentistas del edifico de la Plaza de San Jaime, entre los límites de las calles del Obispo, de San Severo y de San Honorato. A mierda huelen, los calzoncillos de los que mañana seguro que no se atreven.</p>
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Tanto trajín de tripas hay entre los independentistas, que no hay fortasec que dé respiro a tanto cagón rentista.</p>
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La Vía Layetana se tragó ayer a España, y la indigestión es ahora en Barcelona la cuestión. No tenemos ya miedo a la Cataluña rehén de la estelada, porque aunque vivimos en un Estado estreñido, los españoles hemos renacido.</p>
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Mañana será diez y martes, del mes del cambio de hora, y ya no habrá sitio para una Cataluña huidora y sin papel en el váter. </p>